Nuestros cuerpos cambian todos los días. Por ejemplo, a medida que envejecemos y ganamos o bajamos de peso, el embarazo o la lactancia pueden hacer que la piel se estire de diferentes maneras, por lo que muchas personas recurren a la cirugía plástica.
Uno de los procedimientos más comunes es la cirugía de estiramiento de brazos (también conocida como estiramiento de brazos). Los pacientes que han perdido mucho peso ahora pueden tener exceso de piel colgando de sus brazos.
¡Esto no es físicamente dañino para su salud, pero tampoco muy agradable estéticamente!
La buena noticia es que puede hacer algo al respecto: la cirugía de braquioplastia se puede usar para eliminar esa piel extra y tensar los brazos para que se vean más firmes y bien formados nuevamente.
Es un procedimiento rápido y efectivo que ayuda a eliminar el exceso de piel y grasa debajo de los brazos, haciendo que la parte superior del cuerpo esté más en forma y tonificada.
La cirugía también se conoce como «cirugía de estiramiento de brazos» y generalmente se realiza para tratar la flacidez de la piel después de la pérdida de peso o el embarazo.
Una braquioplastia generalmente incluye: